Wanaku Akunkawa surge en el invierno de 2020, cuando los guanacos bajaron a sectores precordilleranos evidenciando su presencia en las montañas de la región de Valparaíso. Dicho invierno, caracterizado por un mes de junio lluvioso, tuvo importantes acumulaciones de nieve en la alta cordillera, causando el desplazamiento de la fauna hacia sectores precordilleranos donde hoy habita o transita la humanidad. La interacción de ésta con la fauna silvestre generalmente es conflictiva y el caso de los sectores precordilleranos de la región de Valparaíso no fue la excepción, registrándose múltiples casos de caza furtiva de guanacos, atrapamientos en cercos y ataques de perros.
Ante esta situación un grupo de ciudadanas y ciudadanos decidimos formar Wanaku Akunkawa con la finalidad de dar luz a esta situación; poner en valor su presencia y la de toda la biodiversidad de la cordillera; fomentar el adecuado desenvolvimiento en la naturaleza y aportar, desde la ciudadanía, a la generación de conocimiento científico sobre nuestras montañas, a partir de la creación de una base de datos donde se registran los avistamientos de guanacos que nos son reportados.format_quote
En nuestra existencia de poco más de un año hemos podido evidenciar que la cordillera de la región de Valparaíso es un territorio rico en biodiversidad, que esconde secretos como lagunas altoandinas donde anidan cientos de piuquenes, un alto endemismo en cuanto a flora y una trama de vida que supera por mucho la trilogía andina del guanaco, el puma y el cóndor e incluye a seres enigmáticos como el gato andino y otros emblemáticos como el chorlo cordillerano, el pato cortacorrientes, vizcachas, chingues, zorros, caranchos y un largo etcétera.
Al funcionar como una red donde la propia ciudadanía y las y los amantes de la montaña nos envían sus registros de guanacos, hemos podido conocer que las poblaciones de este camélido en cordillera de la región de Valparaíso se ubican desde el valle del río Juncal hasta el límite norte de la región, en la provincia de Petorca. Coincidentemente, el territorio donde contamos con registros de guanacos está poco intervenido por la industria extractiva, lo que nos permite entender la relevancia de que existan grandes territorios sin alterar para la flora y fauna, más en la zona central de Chile, la cual ha sido profundamente intervenida. Esto también nos permite entender la amenaza que constituyen una serie de proyectos mineros que pretenden instalarse en el territorio y de la importancia de que se creen áreas protegidas en todo el territorio nacional.
Finalmente comentar que éste también ha sido un viaje al pasado, ya que hemos podido conocer el importante rol que poseía el guanaco en las culturas andinas, lo que se ve reflejado en cientos de petroglifos a lo largo de nuestra cordillera, tornándose esto también en una de nuestras misiones, sacar al guanaco del olvido en que hoy habita en nuestra cordillera y devolverle el sitial de honor entre las especies con quienes compartimos este maravilloso territorio.
La puesta en valor del guanaco como especie emblemática de la cordillera de la región de Valparaíso, es la puesta en valor de todo su ecosistema, de un territorio por muchos ignorada, que guarda un patrimonio de vida que debe ser protegido